jueves, junio 28, 2007

ESTE BLOG NO SE ACABÓ

Imagen: Máquina de escribir, obra de Jules White.

Ah, esto es mucha sequía. Un post sobre no escribir en blogs. Menos mal no soy el único.

Por estos días, según puedo hacer un diagnóstico parcial y poco representativo, yo diría que hay una especie de sequía bloguera. La media docena de blogs que visito no ha actualizado con mucha frecuencia, exceptuando tal vez el blog de Alejandro Gaviria, y mi amiga Marcelius, que nos ha mantenido a los lectores al tanto de sus cuitas en tierras teutonas. Tiempos ocupados, y, cuando no ocupados, cargados de malparidez cósmica y otras mañas adolescentes que no podemos dejar.

El caso es que no puedo evitar pensar en esto de escribir en un blog más que en términos de lo que uno da y lo que uno recibe. Escribir, para empezar, debe ser una tarea agradable para que uno lo haga, porque, por más que uno sea un bloguero muy popular con más de 50 comentarios por texto, todas las palmadas en la espalda del mundo no pueden sentar a nadie a escribir cuando no quiere. De modo que para empezar, uno sí quiere escribir. Francamente, me parece que gran parte de la gracia está en exponer a los demás a lo que uno escribe. Hay algo de imposición en el asunto, una especie de exibicionismo. Si fuera el caso que uno escribe sólo para sí mismo, no habría tantos blogs que se cerraron porque al autor le pareció que no valía la pena escribir si nadie lo lee.

Otros blogueros, claro, cierran su blog porque se dan cuenta de que es un vicio, no tanto el escribir (ojalá fuera ese el vicio) sino estar pendiente de lo que le comentan. Si ese es el caso, yo recomendaría más bien dejar de ver los comentarios por un tiempo: eso será difícil, pero la gracia es que precisamente es un ejercicio desafiante para la voluntad. Digo, hacer eso en vez de cerrar el blog.

Mi caso no es uno ni otro, porque por el momento tengo justo la audiencia que quisiera tener. De hecho, me sentiría mal por no contestar comentarios. Hay blogueros que no lo hacen, y no digo que sean maleducados o algo así, pero en este blog en particular me sentiría mal de no contestarlos, porque me doy cuenta de que es más difícil para ellos comentar que para mí escribir. No es que vaya a ser condescendiente con ellos, porque creo que no lo soy, pero sí me parece que merecen mi atención, más de lo que yo merezco la de ellos en primer lugar.

Incluso me siento mal por no comentar en otros blogs. En algunos, me lo impiden misteriosas circunstancias técnicas, como en el caso del blog de Alvaro Naira, blog que por alguna razón parecen rechazar mis navegadores. En otros, como el de Stavrogin, me habitué a escribir opiniones que aporten, y usualmente alguien dice lo que yo ya pensaba decir, y me quedo sin nada que opinar. Y ese es un blog en el que los comentarios suelen inponer un nivel alto de sofisticación, que a uno le parece que podría fácilmente echar a perder. Usualmente, las razones para no comentar en otros blogs se acercan más al caso de Stavrogin que al de Alvaro, pero aún más frecuentemente tienen que ver con que no tengo tiempo ni atención para visitar blogs. Especialmente en estos tiempos extrañamente desérticos para toda la blogósfera.

En fin. No creo, o mas bien, espero que no vuelva a pasar, que vuelva a tener que escribir un texto como éste sobre no escribir blogs. Pero para que no parezca que se está perdiendo gran cosa, las ideas sobre las que podría escribir si mi cabeza diera para tanto, serían las siguientes:
  • La psicología transpersonal
  • El aniversario de 50 años del departamento de Ciencias de la Computación de la Universidad de Glasgow (todavía estoy recogiendo fotos e impresiones para eso)
  • El arma "punto de vista" (POV weapon) en la guía de la galaxia echando dedo: la película. Hey, un momento. Ese sí valdría la pena.
  • El arte del acecho en Castaneda. Uno difícil de escribir.
  • Reseña del libro "Shabono" de Florinda Donner-Grau. (uy, me doy cuenta de que no he reseñado ningún libro. Qué paila.)
  • Reseñas de cualquier pendejada que me encuentre en la interné.
En fin. Por falta de temas no sufrimos. Es falta de voluntad para escribir, más bien.

23 comentarios:

Anónimo dijo...

Muchas gracias por este post, Lanark. No sé hasta qué punto puedo parecer un egocéntrico, pero no hay que ser muy astuto para intuir que escribiste esto después de haberte pasado por mi blog.

Estoy de acuerdo contigo en casi todo, como de costumbre. Creo que en realidad lo único que nos ha separado siempre es ese excesivo pesimismo que a veces me deja en situación de cortocircuito. Una cuestión de madurez, supongo.

Todos escribimos para los demás, eso está claro. Sabemos que incluso los redactores de los diarios más íntimos hacían correcciones y comentarios pensando en un lector imaginario. Algunos incluso confiaban en que su diario pudiera alcanzar un éxito editorial póstumo. Todos necesitamos comunicarnos, somos seres sociales. También necesitamos el reconocimiento ajeno. No hablo de fama, hablo de aprecio, carino y todas esas cosas.

A mí también se me quedan muchos temas en el aire. Podría seguir escribiendo un post semanal sobre la Modernidad, el desarrollo, el progreso o mi vida, pero hace tiempo que me siento cansado. A mis problemas personales habituales se ha unido mi fracaso profesional en Chipre, y creo que es la hora de tomarme mi vida más en serio.

Creo que fuiste tú quien dijo una vez que los viejos chamanes a veces necesitaban destruirse a sí mismos. Sin ser un chamán, creo que siento una necesidad parecida. Ahora sólo quiero descansar, hacer autocrítica, aprender cosas nuevas, recuperar algo de contacto social y dejar de vivir un cuento literario. Sé que volveré a escribir, porque en realidad es una de las pocas cosas que me gustan.

Gracias infinitas por tus esmerados y brillantes comentarios. Sé que a Kyboy siempre le parecieron pretenciosas nuestras discusiones, pero sin ellas nunca me hubiera decidido a escribir post tan largos ni tan analíticos. Escribía porque sabía que había gente que entraba todas las noches y me leía con detenimiento e interés. Ni siquiera me importó que durante los últimos meses postearas un poco menos. Sabía que seguías entrando y leyendo, y eso es lo que cuenta.

En fin, espero que saques tiempo libre para seguir tratando todos esos temas que apuntas. Tu curiosidad intelectual es lo que te lleva al infinito. Yo seguiré por aquí, leyéndote siempre y comentando solamente cuando tenga algo que aportar.

Un abrazo,
Pablo

Kyboy dijo...

Es difícil generar “aprecio, cariño y todas esas cosas” cuando se es cínico y arrogante. No hay que olvidar que lo que la mayoría de la gente recuerda no es lo que se dice sino el tono con que se dice. A mi personalmente me simpatizan mucho los comentarios de Don Stavro y Don Lanark porque también soy otro hijodeputa con un ego gigante que se cree, por lo menos intelectualmente, superior a la mayoría (lo cual no quiere decir que no lo sea), aunque, en comparación, estoy convencido de que me encuentro en ligas menores. Puedo además asegurar que a esta categoría de seres humanos pertenecen casi todos los lectores habituales de sus respectivos blogs. Es por eso que ustedes tienen los lectores que se merecen, pero posiblemente no sean aquellos a los que les aprovecharían más sus comentarios.
Esto tiene un poco que ver con ese nivel de agudeza, pertinencia; y en algunos casos forzada camaradería, que se espera implícitamente por parte de todos. (ojalá que no sea esto lo que mantiene contento a Don Lanark con sus lectores… ese juego de mutuas complacencias). A la larga esto se convierte en una competencia pretenciosa que nos obliga a ponernos mascaras para mantener una imagen y ser consecuentes con un personajillo que tarde o temprano termina por sofocarnos y agotarnos. Esto nos pasa a todos pero principalmente a los dueños de los blogs; los que simplemente opinamos somos un poco más libres, tenemos una posición más cómoda.

p.s. Quiero aprovechar y mandarle a través de Don Lanark un saludo a Memo, mi amigo de toda la vida. Y a don Stavrogin, que me salude de todo corazón a Pablo “El Pollagorda”, que le diga que me gustaría mucho conocerlo y conversar personalmente con él algún día, que le recomiendo un largo descanso y que se olvide de su fracaso profesional, que recuerde que el éxito es para los pusilánimes.

Una Papita dijo...

Mmmm. no. Lo mío es simplemente falta de tiempo.

Y qué más don Lanark?

Una Papita dijo...

Ah, bueno, y por pereza también un poco.

Andrés David dijo...

Egos gigantes, comentarios de alto nivel, falta de tiempo, exceso de pereza, temas de temas.

Más que malparidez cósmica a veces el rollo es que no queda como uno lo siente. Lo tienes clarito, hermoso, con todos los giros que quieres darle y al releerlo te das cuenta que es mediocre. A la basura y a empezar otra vez.

Más que mediocridad es eso que menciona Stavrogin sobre destruirse. Antes de que los blogs tomaran forma, le enviaba a mis amigos un correo semanal con pequeños (pretenciosos) ensayos. Un año logré sostener el ritmo hasta que me mamé. La necesidad volvió y ya no enviaba correo sino que publicaba en mi página de la universidad. Así otro par de veces hasta ahora.

El cuento es que uno empieza a escribir por gusto y se le convierte en obligación, se pierde la gracia del asunto. Ahí toca destruirse y volver a arrancar, pintar la casa de otro color, cambiar el estilo, lo que sea necesario para volver a enamorarse del hecho de escribir, para aceptar (otra vez) que si es una compulsión y estar en paz con ella.

Un abrazo.

Lanark dijo...

Stavrogin: La época de sequía bloguera ha tomado un viraje muy interesante con esta especie de diálogo de gente de verdad, momentáneamente sin máscaras. Verdaderamente refrescante, y me atrevo a decir que mucho más sano. Sobre tu aniquilación, me voy a limitar a transcribir y traducir un texto de Mircea Eliade:

"...Los momentos importantes de la iniciación chamánica son 5: primero, tortura y desmembramiento violento del cuerpo; segundo: raspado de la carne hasta que el cuerpo es reducido a un esqueleto, tercero, sustitución de las vísceras y la sangre; cuarto, período en el infierno durante el cual el chamán interactúa con demonios y espíritus de chamanes muertos; quinto; ascención al cielo para obtener la consagración de un dios del cielo"
Varias narraciones de un proceso con estas características las había leído en un libro sobre chamanes de la antropóloga Joan Halifax, y se pueden tanmbién encontrar en otros sitios. Son particularmente crudas las narraciones provenientes de culturas que viven en un medio hostil, como los esquimales. La narración que más me gustó fue la de Autdaruta, que era comido y vomitado por un oso polar mágico. En su narración, la única etapa dolorosa era cuando el oso mordía su corazón.

Kyboy: Se siente delicioso poder opinar desde una posición más personal a la del sabihondo que pontifica sobre lo divino y lo humano. No estoy seguro de qué es lo que me mantiene contento, pero también espero que no sea una camaradería forzada. Sobre el mundo bloguístico, me acuerdo de uno de esos dichos de algún abuelo de Marcelius: "en este mundo habemos muchos hijueputas", jejeje

Y gracias mil por la postdata, manda decir el Memo. Que un abrazo larguísimo.

Angelus: La pereza de leer blog y comentarlos tiene que estar entre las formas más sanas y edificantes de pereza. Espero ser bendecido más frecuentemente con una pereza de ese tipo, en vez de otros tipos de pereza. Y el tiempo, si. En la guía de la galaxia echando dedo decían:
"Time is an ilusion
Lunch time, doubly so" (el tiempo es una ilusión, pero la hora del almuerzo lo es el doble)

Andrés David: La historia de tu blog es más bien atípica, me parece. Pero es universal lo que dices de que escribir comienza como un gusto y termina como una obligación. De antología. Y tienes toda la razón en que si uno no puede volver a plantearlo todo desde cero, pierde gran parte de su gracia, tal vez casi toda.

Sobre la compulsión, algún escritor de Nueva Era debería escribir un libro que se llame "Sanando tu Jaime Ruiz interior"

jotasen dijo...

Con respecto a la actitud de quien ofrece un conocimiento que posee, me atreveré a citar uno de los concejos del I Ching que aparece dentro del hexagrama llamado "La posesión de lo grande":

"Un principe lo ofrenda al hijo del Cielo
Un hombre pequeño no sabe hacerlo.

Es cosa de un hombre magnánimo y de pensamiento libérrimo el no considerar su posesión como propiedad exclusívamente personal y de ponerla más bien a disposición del soberano o del bien público. Adopta asi un punto de vista correcto frente a la posesión que, en cuanto propiedad privada, jamas puede ser duradera. Un hombre de corazón estrecho, un hombre mezquino, ciertamente no es capaz de semejante actitud. En su caso una posesión acarrea daños, puesto que en vez de sacrificar él intenta conservar."

Anónimo dijo...

ufff... me le dio una crisis existencial en el mundo virtual?

Lo mas importante de este asunto de los blogs, foros y demás es la posibilidad de encontrar información útil desde el punto de vista del lector, por supuesto, porque quien escribe muchas veces lo hace sin pretensiones. Por lo general leo blogs sobre asuntos informáticos y musicales mas uno q otro como el del señor Lanark o el alma bendita país bizarro q me producía dolor de estomago de tanto reír, pero por q busco estos ¨chuzos¨ virtuales y no otros? creo q busco satisfacer mis necesidades, algo de conocimiento algo de entretenimiento y también encontrar gente con afinidades y dispuesta a compartir lo q sabe o lo q le preocupa.

No se pregunte por cuantas visitas tiene, si comentan o le dan palmaditas en la espalda, sientace bien por ese deseo q tiene de compartir vainas, independientemente del ego q pueda florecer al hacerlo. Nos pillamos

Christian Giovanny

PD. ¿cuando reanuda su saga de Linux?

Anónimo dijo...

Mientras no haya forma de compartir una cerveza bien viene usar este blog que acorta distancias. Mientras no haya formas de publicar un libro o una revista bien viene usar este blog.

Mientras hayan ganas hay que escribir este blog. Si se acaban las ganas compartir con alguien unos tragos viene bien y dan ganas de escribir sobre algo.

Cuando me bloqueo con un guíon (porque ahi toca porque toca escribir)me voy con un amigo/a a Crab´s y listo.

Andrés Meza Escallón dijo...

Bueno, fuera de la impresionante imagen de la máquina de escribir cadavérica (parece salida de cualquier hambruna etíope que se respete) me gustó la reflexión sobre los comentarios.
Hice mi aporte en Del fino arte de comentar.

Andrés David dijo...

Gracias Duval, se me había olvidado algo sobre la máquina de escribir: me recordó esas que aparecen en Naked Lunch. Cualquiera lo pensaría dos veces antes de escribir en ellas.

Addiction Kerberos dijo...

Por qué no paran? Por qué no paran ya la farsa? Acaso tenemos otra dilucidación sobre el rol de los blogs como un diálogo intertextual entre el autor y el lector? Fucking shit: si el texto no es capaz de responder por si solo debe morir en su propia impotencia. ESTE BLOG NO SE ACABÓ? y a quién carajos le importa? Que quiero escribir sobre Florinda Donner, maldita usurera estafa crédulos e imbéciles, que ya no se abren las puertas al infinito por una cuanta cantidad de dolares, no entienden? Porque no retozarse sobre el vacío místico, que la ausencia de Dios tambièn es una puerta al mito. Máquina de escribir, estropeada, porque esto no es producción, no produzco palabras como produzco carros, porque el pensamiento no es fruto mío ni del hombre y si acaso yo soy su producto, también atrofiado, también ya muerto.

Lanark dijo...

Jotasen: No lo había visto por ese lado... no intentar conservar sino entregar, esa es la vuelta. Sin embargo, a mi me llama la atención cómo el I Ching siempre dice las cosas como si fuera una cuestión moral para el individuo separado, aunque el sentido siempre es superar esa condición. Tal vez el I Ching está escrito así para que lo entendamos nosotros, que todavía estamos separado de los demás y devanándonos los sesos con dilemas morales.

Gracias de nuevo por el aporte, que por un rato me ha dado una perspectiva nueva del asunto.

Cgiovanny: Nah, es el blogoparche el que está con malparidez. Yo, por el contrario, estoy lo más de bien, por el momento.

Hola, y sí tengo abandonado el tema del Linux.

Bochica: Hace mucha falta, eso de charlar. Es de las cosas que más extraño de haber venido. Tal vez sea que todavía no conozco suficiente gente, pero no he encontrado charla tan amena como la que tenía en Colombia por costalados. Y ahora que el filósofo griego se fue de vacaciones, esto sí que es un peladero por acá, en lo que se refiere a charla en persona, con eventuales oasis. Mucha charla sobre el clima y "¿y de dónde eres? Por allá es bonito, ¿no?"

Apolo: Hombre, cuánta pantalla que me diste. Está bueno el post. Ya pasaré a comentar por allá.

Andrés: Me encanta esa máquina de escribir, por alguna razón. Tal vez tiene que ver, sí, con el Almuerzo Desnudo. Y con aquello de la muerte que mencionava Stavrogin.

Herr Luis: Un profesor de la universidad solía hacer esta pregunta retórica: "¿por qué los perros se la pasan lamiéndose la entrepierna?" y cuando uno estaba en medio de la confusión tipo koán que provocan esas preguntas, él mismo contestaba: "porque pueden.

De modo que por eso los blogueros nos regamos en cháchara estéril: porque podemos. Si uno lo piensa, no es tan diferente de un perro lamiéndose.

Sobre doña Florinda, lo bueno de ser pobre es que no puedo arrimarme a parches chamanísticos para oligarcas, y me toca contentarme con la ausencia de Dios, que es mucho más barata.

shoegazer dijo...

hmmm bueno.
Yo venía leyendo comentarios y pensando qué poner, hasta que llegué al de Kerberos y me botó un poco por la tangente. Como su miserabilismo apenas digno de chico emo en youtube no me convence, me disculpo pero procederé a ignorarlo y a soltar un típico comentario de los que empiezan con "a mí me parece que...":

A mí me parece que los blogs, al igual que Second Life, las salas de chat, y otros perendengues de la comunicación por medios digitales, fomentan una forma de verse y ver a otros muy artificial pero reveladora. La cosa es que se pone en marcha el mecanismo de construir un autor, que tiene su parecido con la manera en que uno se "presenta" en la vida real, pero es una versión simplificada al ser un poco más consciente e intencional (no del todo). Al escribir el tipo de textos que se ponen en un blog, la intención de fondo es construir un personaje-autor, seleccionando algunos rasgos que uno cree tener en su personalidad y tratando de hacer desaparecer los demás. El diálogo entonces se produce entre entidades ficticias. Y el diálogo también hace que el proceso sea algo distinto a lo que hace el escritor, digamos, de libros. En esa medida, el tipo de relación que se establezca o desee establecer con los lectores es decisiva para el tipo de personaje-autor que se construye: si uno sabe que los papás, las primas y tres profesores lo leen, se presenta como una cosa; si son amigos recientes o relaciones endebles, es otro personaje; si es un público lejano y desconocido pero recurrente, es otro autor... Me doy cuenta de que estoy diciendo obviedades, pero a lo que iba es que la abstracción creada por la invención de un autor es muy palpable en los blogs, sobre todo en los blogs de gente que uno conoce en la vida real. El autor de un blog no es la persona que uno conoce. Entre más escribe, más extraño resulta, más se aleja y se abstrae. Tal vez lo único que pasa es que con los escritores 'de verdad' uno casi nunca tiene la oportunidad de confrontar las dos versiones del sujeto...

Anónimo dijo...

y así pasaran los años

Andrés David dijo...

Lo que dice Shoegazer me hizo entender algo. Además del desgaste,
tener un periodo seco venir después de un cambio en el público y la consiguiente necesidad de rearmar el autor-personaje.

Bien sea porque aumentan los desconocidos, porque se conoce a los desconocidos, o porque se crea un nivel de familiaridad con los otros autores-personaje, la figura inicial deja de funcionar (o sentimos que ya no lo hace) y viene la sequía, la destrucción y la
recreación.

Anónimo dijo...

jejeje... viva la economia de los "agnosticos", mmm, no creo que puedo tener aun problemas con el lenguaje. Pues planteas temas chevere para las proximas entradas. Supongo que las esperare a ver si podemos aportarnos cosas (otra razon para mostrarse).

Un saludo.

Lanark dijo...

Shoegazer: Así es, con lo que uno pone en el blog va construyendo un personaje que es distinto al que uno muestra en cualquier otra parte. Me acuerdo, y me da un poco de risa, de alguna vez que aclaraba vehementemente que en persona soy mucho menos arrogante que como personaje-autor.

Y también es cierto que los comentaristas tienen una influencia enorme en el personaje que uno va construyendo, tal vez mayor que la de uno mismo. Aunque usualmente ellos no tienen mucho control, porque no saben cómo exactamente están influyendo. Como por ejemplo los blogueros mamertos arrinconan a la gente a la esquina de los fachos, y los fachos a la de los mamertos, sin darse cuenta. No sólo en el caso de las actitudes políticas (si, yo sé que ese es el ejemplo más aburrido que se me pudo haber ocurrido) sino en cualquier otro: uno toma más facil anti-modelos que modelos, es decir, uno piensa "uy, yo no quiero escribir como fulano"

Ahora que lo pienso, la idea de abrir este blog para mantener contacto con los que conocía fue bastante ingenua, porque el autor de el blog no es el mismo que ellos conocieron.

Lalo: Te creo; así pasarán los años. Lo creo, porque según vi, tu blog data del 2004... gracias por la visita a éste blog algo más nuevo.

Andrés David: La interacción con los demás blogueros sí es una cosa complicadísima de entender. Menos mal que, por más que digan lo contrario, es una influencia secundaria. Los blogueros somos muy egocéntricos, y realmente no es que les paremos muchas bolas a los demás.

Toniov: ¡Que viva! Algo de bueno tendrá ser pobre, jejeje.

De todos modos, me gusta mucho eso de "sopesar cuidadosamente todas las razones, los pros y los contras , para después desecharlos sin más, y actuar espontáneamente". Todavía estoy lejos de poder actuar con el famoso desatino controlado, pero pues se hace lo que se puede.

Anónimo dijo...

Yo no soy blogger. Soy libre jejeje.

quisiera tomarme un cafe con Shoegazer, colega que debe tener su autor-personaje ante los desconocidos asi no sean virtuales. La autenticidad desde hace siglos escasea. aunque mucha razón tiene aún así...

Totis dijo...

Tipico. a mi me ocurre lo mismo. Y es más. aquello podria perfectmemte bautizarse como 'el mal de Blogger' en nombre al famosisimo agente que produce todas las variantes que proporcionas.

Saludos y bueno, la primavera no necesito llegar para actualizar Macedonia.

Bye, buen blog.

vulturno dijo...

Hace unas semanas me estrellé con un caso un tanto diferente, un blog cortado por sustracción voluntaria de autor no más de dos días después de su última entrada. Vine a ser uno de los dolientes virtuales, pues apenas era lector ocasional y diálogo nunca tuvimos. Me puso a pensar qué tanta trascendencia le puede dar uno a estas cosas.
Sobre mi personaje blogueril comenté a una amiga que, aunque no hay fidelidad, he puesto tanto de mí en él que no he dejado nada llamativo para uno en el cual firmara con mi nombre verdadero. Con todo, pese a los modismos, muletillas y frases (que como las armas en El Bueno, el Malo y el Feo, tienen timbre); como el 115% de mis amigos cercanos no lee blogs, se trata de un heteronimato superfluo.

David Cordoba dijo...

La verdad este blog me parece muy interesante aunque a veces no tenga muchas nociones de los temas que trata el señor Lanark.

A mi me sucedió que mi blog se había convertido en trabajo y eso me agotaba, decidí reiniciarlo y las cosas van en buen camino. No creo que esa sea la solución para todos los blogs pero en mi caso particular esa fórmula me sirvió.

Y pues mal que bien contamos en esta época con esta herramienta de expresión, creo que es una excelente manera de manifestarse, en especial cuando los amigos cercanos están a miles de kilómetros de distancia

Un saludo

David

Lanark dijo...

Totis: Mal del blogger... si, eso es. Me alegra que Macedonia siga a flote; que haya sobrevivido el ¿crudo? invierno sin hibernar demasiado. El último post que me encontré allá me gustó mucho, aunque confieso que me costó un poco leerlo de una sentada. No por falta de ritmo ni nada de eso, sino por algunos recuerdos que me evocó.

Vulturno: Hay que reconocer que tu blog tiene más trabajo y substancia que la gran, gran mayoría de los demás blogs, incluyendo desde luego éste. Si tu heteronimato (¡tilín!) es superfluo, con mayor razón lo es el mío. Eso, la verdad, ya lo sospechaba.

David: Tu caso me recuerda mucho un libro que acabé de leer hace poco: "Intimacy" de Hanif Kureishi. Tiene una reflexión de fondo sobre cómo la vida de pareja cambia completamente con la rutina. El personaje principal toma una posición tan egocéntrica y aparentemente superficial, que no es descabellado decir que se refiere a sus relaciones en los términos en los que se referiría a un pasatiempo como mantener un blog. Según él, sólo tiene sentido cuando le depare a uno más sorpresas y satisfacciones que obligaciones rutinarias.

COMPREN, COMPREN