sábado, enero 27, 2007

MEDIDA

imagen: el cable de Manizales, hito histórico del desarrollo de la región, y piedra en el zapato del hombre gordo.

Medida
es una palabra con muchos significados, todos muy interesantes. La mayoría, vienen de una raiz común, un verbo en latín que significa comparar con una unidad apropiada. Como cuando uno toma una regla, y compara una longitud con las que representan los números en la escala. De ahí viene también la noción matemática de medida, importantísima en la definición de ciertos espacios, y de los operadores que actúan sobre ellos.

Cuando se trata de medir volúmenes de un líquido, ocupación que se llevó un buen porcentaje de mi tiempo cuando estudiaba química, comparábamos el nivel del líquido con un aforo, (aquí un ejemplo en wikipedia) una marca que determinaba una unidad de medida estándar para un determinado recipiente.

La falta de estructura de los líquidos hace que no conserven su forma, y por lo tanto, llenen completamente el recipiente hasta el aforo, desplazando todo el aire dentro.

Por otro lado, también se le llama medida a la capacidad de limitar una acción, es decir, de hacerla en cierto modo coincidir con, o al menos limitarse por, una unidad razonable. El que hace algo en demasía, lo hace sin medida. (dice la canción "ódiame sin medida ni clemencia", queriendo decir sin límite). A actuar sin medida, le llaman también actuar desaforadamente, con relación al aforo mencionado antes.

Toda esta disquisición me la inspiró un texto del escritor colombiano (antioqueño) Fernando González, el filósofo de otraparte, considerado por algunos el único filósofo colombiano. Este texto habla de una cierta clase de personas carentes de medida, cuya carencia de estructura los lleva, como los gases, a expandirse, en cierto modo, hasta ocupar todo el espacio del que disponen. Fernando González vivió a principios del siglo XX, y fue testigo excepcionalmente suspicaz de la consolidación del capitalismo, con cierto tipo de hombre sin medida que éste estaba creando. Eso, claro en una versión muy idiosincrática, que el sólo atribuye al trópico.

Así fue como en su libro "viaje a pie", de 1929, editado por la Universidad de Antioquia en 1993, desarrolla la idea de este hombre sin estructura y sin medida que iba a ser tan preponderante en el siglo XX, y sigue por desgracia siéndolo. Este libro es un libro relativamente escaso y poco conocido, que me regaló un físico colombiano que resultó relacionado conmigo por dos lados completamente diferentes e improbables. Y el libro corrió también la improbable suerte de ser uno de los 4 que, en mi austeridad, me traje a Glasgow.

En este libro, González se refiere a este hombre sin estructura ni medida como el hombre gordo. Tal vez hoy en día se considere políticamente incorrecto llamarlo así, y tal vez se confunda con la superficialidad de los medios masivos de comunicación que reduce todo a la apariencia. Pero, ya con el preámbulo, espero que mis lectores lo entiendan mejor:

Noche horrible aquélla, pues roncaba a nuestro lado el hombre gordo de Medellín. Venía de las olimpiadas de Cali, borracho, este señor Jose María. ¿que no hay una pieza? ¡bien pueda cobrar lo que quiera! ¡aquel viejo ladrón de Manizales me alquiló esta mula!... ¡pagué cien pesos, y mire usted lo que me dio! ¡cómo despilfarran dinero los manizaleños en esos cables! ¡el Valle del Cauca no sirve para nada! No hay como Medellín, en donde se propugna por las carreteras.
Entonces vimos claro el significado del hombre gordo. Este es un producto del trópico, así como los cucurbitáceas que cubren las tierras del Retiro. El hombre gordo es el hombre exagerado; carece de lo que llamaban los clásicos y los moralistas antiguos el sentido de la medida. Son muy peligrosos; caen sobre los individuos y los pueblos como una montaña aplastadora: dos hombres gordos idearon la Carretera al Mar, que ha sido nuestra ruina, y dos hombres gordos han gastado en eso dos millones. Toda nuestra vida de república ha sido vida de hombres gordos. Siempre hemos carecido de la delicadeza del animal de sangre. Ser hombre flaco consiste en aceptar la idea o sensación actual de un modo equilibrado, o sea armonizándola con su complejo espiritual. A los antioqueños los domina una idea o un deseo, y se desparraman.
(...)
Para adquirir el éxito es necesario darle todo nuestro corazón al fin perseguido, y desechar todo lo demás en cuanto no tenga relación con él por bueno y agradable que sea. Esta es la filosofía del hombre gordo, que ronca sin medida en la casa de doña Pilar, soñando, quizá, en propugnar por las carreteras.

Probablemente, en estos tiempos post-industriales, haya que matizar este personaje con nuestros nuevos ricos contemporáneos, especialmente los nuevos ricos que deben su fortuna a crímenes novedosos, como el narcotráfico globalizado (no es novedoso en sí, es novedosa la forma como se hace), la especulación financiera, la ganadería extensiva, la extracción de petróleo, y los monopolios del negocio de salud.

viernes, enero 26, 2007

GENTE QUE SÍ SABE DIVERTIRSE



¿Por qué uno no va a fiestas como éstas?

(para mas información, click en la imagen)

martes, enero 23, 2007

PEQUEÑA RESEÑA DE RALPH STEADMAN

Después de varios posts egocéntricos donde mis desprevenidos lectores difícilmente iban a encontrar alguna información útil, he decidido que valen la pena algunas palabritas sobre el que dibujó la imagen que encabeza el anterior post.

Ralph Steadman es un dibujante e ilustrador inglés bastante exitoso, cuya obra pueden consultar en su página, y cuya biografía pueden consultar ahí mismo, o en Wikipedia. Por eso, voy a limitarme a hablar de la forma como dibuja, y a hablar de la faceta de él que mas me interesa, que fue su colaboración con el grandioso Hunter S. Thompson, creador del periodismo gonzo y autor de "Fear and Loathing in Las Vegas" que fue llevada a la pantalla grande por el maravilloso Terry Gillian (el que alguna vez hizo parte de Monty Python)

Como todavía no me recupero de la vergüenza que me dejó publicar un cuento en este blog, y realmente mi cabeza no da para sacar tanto texto y al mismo tiempo producir académicamente, el mismo Hunter S.Thompson va a darme una mano con un texto sobre él. Recomiendo leer el texto entero de "The Kentucky Derby is Decadent and Depraved" (El Derby de Kentucky es Decadente y Depravado) pero de todos modos voy a copiar y traducir con chambonería algunas partes que se refieren a Ralph.

Cuando Hunter S. Thompson llegó a cubrir el Derby de Kentucky para la Rolling Stone, le dijeron que iba a hacerlo con un artista inglés que él no conocía, un tal Ralph Steadman. Hunter no lo encontraba, pero la que atendía el hotel le dijo que ya se había registrado, y había salido. El estaba preocupado de no poder reconocerlo.

"No va a tener ningún problema para encontrarlo. Usted lo distinguiría en cualquier multitud"
"¿Porqué? pregunté. "¿Qué tiene de malo? ¿Cómo es?"
"Bien..." dijo, riéndose. "Es la cosa mas chistosa que yo haya visto en mucho tiempo. El tiene esa... ese crecimiento en toda la cara. De hecho, está en toda su cabeza". Ella asintió con la cabeza. "Usted lo sabrá cuando lo vea; no se preocupe"

Jesús doliente, pensé. Eso jode lo de las credenciales de prensa. Tuve la visión de algún nerdo enervante cubierto de pelo denso y verrugas apareciendo en la sala de prensa por su paquete de prensa "Scanlan". Bueno, qué diablos. Siempre se puede cargarlo de ácido y pasearse por las instalaciones del club con una libreta de dibujo, riéndonos a carcajadas de los nativos y fumando mentolados (¿?) para que los policías no crean que somos anormales. Tal vez hasta podamos sacar algo de eso: "Deje que un artista extranjero pinte su retrato por $10. ¡hágalo ahora!"

"You won't have any trouble finding him. You could pick that man out of any crowd."
"Why?" I asked. "What's wrong with him? What does he look like?"
"Well..." she said, still grinning, "he's the funniest looking thing I've seen in a long time. He has this...ah...this growth all over his face. As a matter of fact it's all over his head." She nodded. "You'll know him when you see him; don't worry about that."
Creeping Jesus, I thought. That screws the press credentials. I had a vision of some nerve-rattling geek all covered with matted hair and string-warts showing up in the press office and demanding Scanlan's press packet. Well...what the hell? We could always load up on acid and spend the day roaming around the clubhouse grounds with bit sketch pads, laughing hysterically at the natives and swilling mint juleps so the cops wouldn't think we're abnormal. Perhaps even make the act pay; set up an easel with a big sign saying, "Let a Foreign Artist Paint Your Portrait, $10 Each. Do It NOW!"


Los temores de Hunter resultaron ser infundados, y Ralph no sólo resultó ser un joven barbado normal, sino que consiguió fácilmente los juegos de tarjetas de prensa para ambos.
Hunter estaba bastante feliz con el trabajo de Ralph, pero tuvieron algunos problemas con la maña de Ralph de hacerle a la gente caricaturas sin su aprobación, para después mostrárselas.
Otro problema fue su hábito de dibujar la gente que se encontraba en las varias situaciones en que yo lo metía, y después darles los dibujos. Los resultados siempre eran desafortunados. Varias veces lo previne contra dejarles a los sujetos ver sus terribles obras, pero él seguía haciéndolo por alguna razón perversa. Consecuentemente, el fue considerado con miedo y odio por casi todos los que habían visto o aún oído sobre su trabajo. El no podía entenderlo. "Es como una broma", repetía siempre. "Pero en Inglaterra es lo mas normal. La gente no se ofende. Ellos entienden que sólo les estoy tomando un poco del pelo"
¡Que se joda Inglaterra! Esto es el medio de América. Esta gente considera lo que haces como un insulto bilioso y brutal. Mira lo que pasó esta noche. Pensé que mi hermano te iba a arrancar la cabeza.
Steadman sacudió tristemente la cabeza. "Pero él me agradó; me pareció un tipo decente y franco"
"Mira, Ralph" dije "no nos engañemos. El dibujo que le diste era horrible. Era la cara de un monstruo. Eso le afectó mucho los nervios." Encogí los hombros. "¿porqué crees que nos tocó salir tan rápido del restaurante?"
"Yo pensé que había sido por el spray" (se refiere a gas lacrimógeno)
"¿qué spray?"
El se rió. "Con el que atacaste al jefe de meseros, ¿no te acuerdas?"
"Diablos, eso no fue nada. Fallé, y de todos modos íbamos de salida"
"Pero nos cayó a todos. Toda la habitación estaba llena de ese maldito gas. Tu hermano estaba moqueando, y su esposa lloraba. Los ojos me dolieron por dos horas; no pude dibujar cuando volvimos al hotel."
"Es cierto" dije. "Esa cosa le cayó a ella en la pierna, ¿no?"
"ella estaba muy brava" dijo él.
"Si... bueno... O.K. Digamos que esta vez ambos jodimos las cosas igual." dije. "A partir de ahora, tu trata de no dibujar a la gente, y yo trataré de no atacarlos con gas lacrimógeno. Sólo bebamos y relajémonos"
"Si" dijo él. "Seamos nativos"

Another problem was his habit of sketching people he met in the various social situations I dragged him into--then giving them the sketches. The results were always unfortunate. I warned him several times about letting the subjects see his foul renderings, but for some perverse reason he kept doing it. Consequently, he was regarded with fear and loathing by nearly everyone who'd seen or even heard about his work. He couldn't understand it. "It's sort of a joke," he kept saying. "Why, in England it's quite normal. People don't take offense. They understand that I'm just putting them on a bit."
"Fuck England," I said. "This is Middle America. These people regard what you're doing to them as a brutal, bilious insult. Look what happened last night. I thought my brother was going to tear your head off.".
Steadman shook his head sadly. "But I liked him. He struck me as a very decent, straightforward sort."
"Look, Ralph," I said. "Let's not kid ourselves. That was a very horrible drawing you gave him. It was the face of a monster. It got on his nerves very badly." I shrugged. "Why in hell do you think we left the restaurant so fast?"
"I thought it was because of the Mace," he said.
"What Mace?"
He grinned. "When you shot it at the headwaiter, don't you remember?"
"Hell, that was nothing," I said. "I missed him...and we were leaving, anyway."
"But it got all over us," he said. "The room was full of that damn gas. Your brother was sneezing was and his wife was crying. My eyes hurt for two hours. I couldn't see to draw when we got back to the motel."
"That's right," I said. "The stuff got on her leg, didn't it?"
"She was angry," he said.
"Yeah...well, okay...Let's just figure we fucked up about equally on that one," I said. "But from now on let's try to be careful when we're around people I know. You won't sketch them and I won't Mace them. We'll just try to relax and get drunk."
"Right," he said. "We'll go native."


Hunter era un poco impulsivo, y siempre estaba drogado con cosas como LSD, mezcalina, o quién sabe qué mas. Pero juzguen ustedes si los dibujos de Ralph Steadman justificaban la indignación de los cuellos rojos, en los siguientes retratos de Shakespeare y Mark Twain:


Y finalmente, una que personalmente me gusta mucho, que es "Eyes are the windows of the soul"

lunes, enero 22, 2007

TIEMPOS PAGANOS

Imagen: "Tribe" por Ralph Steadman


Llegó el momento que yo había temido desde hace tiempo. El momento en que someto a mis escasos y sufridos lectores a mi chapucería literaria. El relativo éxito, entendido como ausencia de fracaso, de mi primera charla en el seminario de la Universidad, me ha subido los humos, y coincidió, no se si desgraciadamente, con un sueño extraño que tuve anoche, y que me inspiró una historia en el género de la ciencia ficción tostada y post-apocalíptica. Que no se diga que tengo vergüenza.

Ayer llegué a Bogotá, todavía calado por el frío del páramo de Sumapaz. Ya fue suficiente de aprender las técnicas del canto asfixiante de los Practicantes del Soplo en Gachetá. Llegó un nuevo aspirante a Practicante, y entonces uno de los que llevaban ya mas de 4 años debía ofrecerse para partir, y fui yo.
Nadie sabe a ciencia cierta cuántas comunidades hay; o si se limitan a la sabana, a los andes, a lo que era Colombia, o a toda Suramérica. A nadie le importa mucho, tampoco.
Se sabe que al sur hay ciertas comunidades donde no sólo se dedican a aprender y a labrar la tierra; en el Valle del Cauca todavía siguen produciendo las cerámicas con las que se hacen los aparatos, o produciendo los mismos aparatos, y en las altas montañas de mas al sur, hay algunos que preservan el arte de los artificios eléctricos. Dicen los rumores que ellos todavía se comunican con diversos rincones del mundo, y que les fue encomendado guardar, reproducir y divulgar parte del legado de la civilización muerta; aunque no hay mucha gente interesada en eso hoy en día.
Y la mayoría de los textiles, especialmente los mas extraños, los que juegan con la luz de manera extraña como si fueran olas en el agua, los hacen al occidente, en lo que era Antioquia. Pero a muchos que he conocido les consta que allá también hay diversas comunidades de aprendizaje.

No estoy seguro de lo que practican los de la comunidad de Bogotá, o más bien los de Teusaquillo, que es la ciudad donde llegué. Dicen que tienen un sitio especial que durante la serie de tormentas de radiación del 2007 al 2017 se volvió un punto de confluencia de no se qué. Dicen que el campo magnético no fluctuó caóticamente como se esperaba, sino que se acopló a una influencia gravitacional exterior inesperada, e hizo aparecer zonas donde pasaban cosas extrañas, y que aunque aparentemente lejanas en el espacio, se conectaban entre sí.
Pues el aprendiz que me recibió, dice que mañana puedo asistir a la primera danza en el Area Extraña. Menos mal parece que acá no tienen ese aire ceremonioso que suele caracterizar a las comunidades donde se aprende menos. Claro que en estos tiempos, a nadie le interesa realmente aprender más, sino saber dónde está en cada momento, y qué es lo que puede aprender ahí.

La noche es tibia, y han organizado una comida afuera, en el patio de una de las unidades de la comunidad. Hay gente de todas las edades, hombres y mujeres. Todos se ven normales, pero algunos hablan con un acento extraño y tienen también unas maneras de comportarse extrañas. Unos caminan arrastrando los pies, pero con la espalda muy recta. Otros tienen el andar de alguien que fuera muy alto y corpulento, a pesar de ser bajitos y flacos.
Al lado mio se sienta un hombre muy blanco, rubio, y con acento escocés. Me saluda, y se sienta a comer al lado mío. La distribución de las mesas y sillas no parece estar pensada para socializar mucho, y el rubio y yo comemos sólos en una mesa pequeña.

El me saluda, y, con la actitud de la persona locuaz que ha tenido que estar callada mucho tiempo, comienza a hablarme.
"Yo no sabía nada. En mi pais, decíamos 'esta pobre gente quedó reducida a la barbarie, perdieron el camino, olvidaron al Cordero de Dios'
Algunos nos ofrecimos para evangelizarlos. Íbamos al áfrica, aprendimos francés e idiomas nativos, pero encontramos que el mar ya no era como creíamos
Las corrientes no eran iguales, y a veces incluso las estrellas se movían de forma extraña" Nuestra única orientación eran el sol y la luna, aunque esta última parecía desconcertar un poco a nuestros marineros. Sabíamos que ya las brújulas no sirven, pero no esperábamos eso
No sabíamos si íbamos a llegar en ningún lado. Cuando llegamos a una playa dos meses antes de lo esperado, los marineros descreídos y paganos admitieron que era un milagro de Dios.
Pero los mismos marineros recién convertidos, al encontrar que la gente no cuidaba sus bienes ni a sus mujeres, y aparentemente estaban locos, se encegecieron de ambición, y trataron de establecerse como tiranos en una ciudad de la costa. Y enloquecieron. Pero no como los lugareños, porque los lugareños no se dan muerte, o bueno, casi nunca. Los marineros, los que no fueron asesinados por sus camaradas, murieron por su propia mano, y fueron enterrados por las mujeres que raptaron y los hombres que tomaron como esclavos.
Primero pensé que todos estaban locos en estas nuevas tierras. Nada les importaba. Pescaban, cultivaban la tierra, y siempre alguien hacía lo que había que hacer, pero no hablaban de eso, ni se preocupaban por nada. Sólo les importaba su magia. Aquí la gente está obsesionada con la magia. Y no es porque no conozcan otra cosa. Cuando para impresionarlos les mostrábamos nuestros aparatos, ellos decían que ya conocían unos que hacían eso, y a veces traían radios, televisores, y otros que no entendimos, pero que parecían muy complicados. Decían que los hacen en el sur
Duré 4 años tratándolos de convertir al cristianismo. Ellos entendían el mensaje, y se aplicaban entusiasmados a aprenderlo, pero se negaban a convencer a los demás. Y al poco tiempo, decían que ya no necesitaban saber más.
Yo esperaba algo diferente. Esperaba gente ignorante que quisiera cocinarme, o tiranos que quisieran establecer contacto con la vieja Europa, o algo así. No esta gente desquiciada. Bueno, es un decir. Creo que en los últimos 4 años después de que dejé de creer yo también me he vuelto un poco loco, y ellos ya no me parecen tan locos. Incluso muchos parecen ser bastante felices.
Pero me siento solo. Uno no puede hacerse amigo de ellos. Un día te conocen, y al siguiente no. Un día hablan contigo, a veces incluso en inglés, que dicen que aprendieron en otra aldea, y después no entienden lo que les dices. No se cómo pueden vivir así. Al menos, yo sigo siendo yo."

De pronto, llegó un grupo de personas, todas persiguiendo a un hombre joven que venía dando grandes saltos y cantando en una cacofonía incomprensible. Cuando lo agarraron, él comenzó a moverse lentamente, y parecía que con el movimiento controlaba a los que lo agarraban, porque también comenzaron a moverse así. En poco tiempo, la mayoría de los estaban ahí ya estaban bailando y cantando, lo que al ser cantada por muchos, ya parecía ser una melodía.
Miré a mi interlocutor, y lo ví lívido, disponiéndose a irse. Murmuró una despedida, y salió corriendo. Me di cuenta de que un hombre anciano había venido hacia mí, y me decía sonriente que se había adelantado el baile, y que yo debía prepararme para ir al Area Extraña ya mismo, con la "respiración por dentro" que había aprendido en los últimos 4 años. De modo que a pesar de haber comido (por suerte no fué mucho) me levanté, y me fuí con el grupo mientras procuraba practicar la respiración lo mejor que podía.
Después de caminar unos 45 minutos, en los que yo ya estaba mareado y viendo figuras geométricas que flotaban en el aire, llegamos a un edificio de ladrillo de formas que parecían circulares, con bonitos jardines y estanques también circulares.
Pero la zona extraña no estaba en el edificio, sino al frente, donde alguna vez parecía que había pasado una avenida y una via férrea. Todo era común y corriente por momentos, pero a veces parecía pasar un viento que hacía ver el suelo cambiar de color y consistencia, y provocaba efectos ópticos muy agradables.
Rodeamos el círculo de los efectos ópticos, y de un momento a otro la danza de los demás me agarró. Me parecía ver mi cuerpo frenético desde afuera, aunque no sabría decir desde donde. Veía los cuerpos de las personas, pero me parecía que de alguna manera estuvieran en varios sitios a la vez. No podía saber si seguíamos rodeando el círculo en la zona oscura, y en cierto momento, tampoco podía saber cuál era mi cuerpo, aunque sí tenía algún sentido de mover los brazos, las piernas... aunque, para ser sincero, no se cuántos brazos o piernas. Supongo que así sentrían los dioses que pintan con muchos pares de brazos y piernas.

De pronto, fui volviendo a mi conciencia habitual, y estaba en un sitio diferente, más montañoso. Había varios volcanes nevados a la vista. Estaba haciendo frío, pero yo estaba bien arropado. Extraño, porque al principio no lo estaba. Mi cuerpo se sentía extraño, también. Más ligero, extrañamente atelético.
Me miré las manos, y vi unas manos mucho más oscuras que las mías, me di cuenta de que tenía una larga cabellera negra trenzada a la espalda. Sentí vértigo al comprobar que estaba en el cuerpo de un joven indio. Una mujer de unos 30 años, también india, me dijo riéndose con desparpajo, y con el mismo acento con el que hablaba el anciano que me llevó al sitio en Bogotá: "Nunca había resultado en una mujer, jajaja"

COMPREN, COMPREN